Categoría: Blog

  • 3 meses ¡Qué rápido crecen!

    3 meses ¡Qué rápido crecen!

    ¡Pero qué rápido crecen estos pequeñines! Parece que hace dos días estaba haciéndole sus primeras fotos de recién nacido pero en realidad esos dos días han sido más de 3 meses. El tiempo vuela. Y ese recién nacido al que le encantaba dormir en los brazos de quien quisiera rodearle con su cariño ahora es un bebé  muy risueño dispuesto a sacar una sonrisa a aquel que le dedique una mirada. Siempre hay cosas que nos recuerdan continuamente lo rápido que pasa el tiempo, pero pocas con la especial intensidad que tiene el ver crecer a nuestros niños. Es algo que sólo se puede entender en primera persona. Da igual que lo hayas visto con sobrinos o hijos de amigos. Cuando lo vives en tu día a día es cuando realmente te das cuenta de la dimensión que tiene el imparable avance de ese crecimiento. De todas esas pequeñas cosas que hacen que el bebé de ayer ya no sea el que es hoy aunque nos demos cuenta de ello mañana. Sí, mañana, cuando nos demos cuenta de que las sensaciones son diferentes, de que algo ha cambiado. Cuando sea demasiado tarde para que intentemos disfrutar de esos momentos que ya volverán, de esa mueca tan graciosa que ya no volverá a poner.

    Crecen muy deprisa. Demasiado. Tan rápido que poco a poco, día a día, nos vamos olvidando de cómo eran tan sólo unos meses atrás. Afortunadamente tenemos la posibilidad de recordar un poco mejor como eran a través de fotografías y videos. Fotos como la que acompaña a este texto, que nos recuerdan esas ropitas con las que estaban para comérselos, esas posturas que sólo ellos pueden adoptar sin apenas esfuerzo y esa mirada, llena de curiosidad y ternura, según van descubriendo el mundo que les rodea. No será lo mismo que cuando tenían ese tiempo, pero aunque pasen los meses y los años podremos volver a verlos y recordar como eran, recordar esas sensaciones que experimentábamos al tenerlos en nuestros brazos. Nos da pena que crezcan tan rápido, pero es maravilloso poder verles crecer día a día.

  • ¡Feliz 2017!

    ¡Feliz 2017!

    Hoy comenzamos un nuevo año, así que antes de nada quiero desearos un muy feliz 2017. En realidad el único propósito de esta entrada es ese,desearos a todos un feliz año nuevo.
    Quiero aprovechar la ocasión para agradecer cada segundo que dedicáis a ver alguna de las fotos. Se que un año más he publicado menos fotos de las que tenía en mente, por eso valoro más aún cada visita a la web o a través de las redes sociales. Un año más, muchas gracias.
    2016 ha sido un año muy intenso, lleno de emociones de todo tipo. Con muchas luces pero también con sus sombras. Siguiendo con el carácter familiar de mis felicitaciones navideñas de este año hoy he querido dar el protagonismo a Gonzalo. Aunque el nacimiento de su hermano ha sido uno de los acontecimientos de mi año, él sigue siendo protagonista, por eso es el encargado de transmitiros ese mensaje. A él y a todos espero que este año os ilumine con toda la luz que hayáis echado en falta en 2016.
    Feliz 2017
  • ¡Feliz Navidad!

    ¡Feliz Navidad!

    Feliz Navidad 2016

    Este año he querido felicitaros la Navidad de una forma diferente a los anteriores. Dado que el nacimiento de Álvaro ha sido el acontecimiento que ha tenido un mayor impacto en mi vida en este año, me propuse hacer una felicitación muy familiar. Y de paso también pensé en escribir la felicitación de mi puño y letra, como se hacía tradicionalmente el envío de felicitaciones navideñas. Y así ha sido, aunque en una versión actualizada en la que he cambiado la tinta de un bolígrafo por luz. Todos los años solemos proponernos en casa volver a enviar felicitaciones en papel escritas a mano, pero del mismo modo los días van avanzando y cuando nos queremos dar cuenta ya es demasiado tarde para hacerlo y que lleguen a tiempo a su destino. Así que finalmente, un año más, acabamos enviando una felicitación digital.

    La verdad es que me he divertido mucho haciendo esta felicitación. Todo el proceso ha sido una actividad en la que hemos participado toda la familia, lo que la hace más especial, al menos para mi. Y ha sido muy entretenido tanto preparar todos los elementos necesarios para la escena como hacer las fotos. Lo más complicado fue conseguir los pies del peque, pero con un poco de paciencia, la ayuda de su hermano y unos cuantos intentos al final conseguimos el objetivo.

    Una foto similar pero similar pero sin los adornos que hacen referencia a estas fechas la hicimos hace un par de meses. Y no fue la primera, hace cuatro años fue cuando hicimos la primera foto familiar de nuestros pies con la llegada de Gonzalo. Esa fue la foto que nos impulsó a repetirla hace dos meses incorporando al nuevo miembro de la familia. Y como este año quería que la felicitación fuera a través de una foto familiar pues pensé en repetirla, pero incorporando algunos elementos navideños. Espero que os haya gustado el resultado tanto como a mi. Pero, independientemente de que os guste o no, lo que si quiero es desearos que paséis unas felices fiestas

     

  • Esos tesoros al lado de casa. Archivo de Simancas

    Esos tesoros al lado de casa. Archivo de Simancas

    Hoy os enseño un par de fotos hechas en Simancas, un pueblo que está a apenas un cuarto de hora de donde vivo y que hasta hace unas semanas no me había acercado a visitar. Pero no porque pensase que no había nada que ver. De hecho el edificio de la foto se ve perfectamente desde la autovía, así que ya sabía que estaba ahí. Habré pasado por delante de él con el coche cientos de veces y siempre me decía lo mismo: «un día tengo que parar a hacer una visita». Pero ese día no llegaba. Ha tardado muchos años en llegar. Y no ha sido parar al pasar, he tenido que ir expresamente a verlo.

    Supongo que no soy al único que le pasará esto. Parece que lo que tienes tan cerca siempre te dices «cualquier día me acerco y lo veo», pero al final resulta que nunca llega el momento de verlo. Cuando tienes tiempo aprovechas para acercarte a lugares más lejanos, y cuando no lo tienes… pues no lo tienes. Así que al final muchas veces lo pienso y me doy cuenta de que me faltan muchas cosas por descubrir de mi entorno más cercano. Están en la lista de cosas pendientes y que se que todavía pasarán mucho tiempo en esa lista. Me queda el consuelo de que algún día les llegará su momento, al igual que le ha llegado al archivo de Simancas, aunque haya tardado 15 años en llegar.

     

  • Cuando el amor se convierte en odio

    Cuando el amor se convierte en odio

    Cuando el amor se convierte en odio es sólo el título de la foto, una foto que tenía que enseñaros hoy. Ya cuando la hice, un par de meses atrás, pensaba en que os la mostraría hoy. No pensaba en el día como 25 de Noviembre, y mucho menos como el Black Friday con el que llevan aburriendo toda la semana (y me quedo corto), sino en el día internacional contra la violencia de género. Y es que es algo que no alcanzo a entender. Por muchas vueltas que le de no soy capaz de entender la violencia contra una persona a la que quieres. La violencia no me gusta, pero puedo llegar a entender que se produzca contra alguien que es un enemigo, hacia el que se siente un odio muy profundo. Pero hacia alguien a quien quieres, alguien con quien compartes y has compartido tantos momentos y tantas experiencias… pues no, no lo entiendo. Y por desgracia estos comportamientos son más frecuentes de lo que en ocasiones pensamos. Quiero pensar que estos actos de violencia cada vez van descendiendo, que estás conductas se irán acabando y llegará un día en el que marcar un día en el calendario para concienciarnos de algo así no sea necesario, y sea sólo un recuerdo de esos tan oscuros que cuentan los libros de historia que ocurrían en épocas pasadas.

    No creo que haga falta explicar mucho de la relación de la foto con este tema. Todos los elementos confluyen en un mismo mensaje. Debo decir que la idea no es mía, sino de la mujer que viste el traje de novia en la foto, esta es sólo mi interpretación de su idea con un mensaje muy claro. Confío que entre todos algún día podremos enterrar el maltrato de una vez por todas.

  • No hay cosa que me transmita más sensación de paz

    No hay cosa que me transmita más sensación de paz

    No se si a ti te pasará lo mismo que me ocurre a mi, pero la paz que me transmite contemplar a un bebé o a un recién nacido mientras duerme plácidamente es imposible de superar. Da igual lo duro que esté siendo el día o lo hayan sido los días anteriores, en el reparador sueño de un angelito encuentro ese oasis de calma en el que evadirme de la realidad por unos instantes y sentirme en paz, sin todos esos problemas que nos agobian en el día a día. Ajeno a todas las preocupaciones hace que pueda liberarme yo de ellas al menos por unos momentos. Tan sólo unos momentos, pero el tiempo suficiente para recargarme de energía y poder continuar con esa carrera de obstáculos que es la vida. Si te pasa igual que a mi seguramente no hace falta que me esfuerce más en describir esa sensación, ya sabes de lo que estoy hablando.

    Otro lugar en el que encuentro paz es en la naturaleza. En el curso de un río, en las olas del mar o en esos parajes que te ayudan a desconectar, como me ocurre en la acequia que os he enseñado en alguna ocasión. Pero es algo diferente. Es gratificante también pero no es la misma sensación, no llega a la paz completa que me transmite un bebé mientras duerme.

    Y como no siempre puedes tener a un bebé durmiendo a tu lado pues lo que si que tengo es la foto que os muestro y alguna más en el móvil, por si en algún momento necesito un poco de paz y serenidad en los que refugiarme. No es lo mismo que en directo, por supuesto que no, pero a mi me funciona bastante bien. De vez en cuando, cuando necesito darme un respiro,en vez de un kit kat, pues echo un vistazo a esta foto y me encuentro un poquito mejor.

  • Y la noche ha vuelto a dejarnos sin tardes

    Y la noche ha vuelto a dejarnos sin tardes

    Todos los años la misma historia cuando llega el último domingo del mes de Octubre. Otra vez el cambio de hora, otra vez el horario de invierno. No voy a poner en duda que pueda tener alguna cosa positiva, por más que yo no sea capaz de ver ninguna, quiero pensar que si sigue vigente es porque beneficia a la mayoría, aunque no conozco a nadie que forme parte de ella. En mi caso no le veo ninguna ventaja. Me sigo levantando de noche por las mañanas, lo que no supone ninguna diferencia con respecto a hace un par de días, pero ahora las tardes se van a reducir a su mínima expresión. Ésto, desde el punto de vista energético, significa que voy a necesitar de una hora más de consumo de luz artificial de forma diaria. Y éso no es lo peor, en mi caso representa que a las 7 de la tarde sientes que ya se ha acabado el día, que ya da más pereza salir a realizar cualquier actividad. Es una sensación de cierta tristeza, que me recuerda que la llegada del invierno se acerca. Seguramente tristeza no es la palabra que mejor lo describe, pero en este momento no encuentro una mejor, aunque estoy convencido de que la hay. Seguro que también es culpa del cambio de hora que no encuentre la palabra adecuada… bueno no, tampoco voy a culparle de todo, no estaría bien por mi parte. Aunque era la escusa perfecta.

    Ya sabéis que soy una persona bastante positiva, que siempre me gusta ver el lado bueno de las cosas, así que con esto no va a ser diferente. Seguramente la imagen que acompaña a este texto te haya dado una pista de el lado bueno que le veo a ésto. Si, has acertado, la ventaja que le veo es para aquellos que disfruten con la fotografía nocturna, ya que ahora anochecerá antes y no habrá que esperar hasta tarde para empezar y se podrá volver antes. Ahora podremos hacer antes fotografías como la que veis. Eso sí, habrá que abrigarse, que durante el día la temperatura está siendo muy agradable todavía, pero cuando el sol se esconde ya es más propia de esta época del año.

    Pues nada, si te gusta la fotografía nocturna disfruta del cambio de hora, para todos los demás… nos quedad esperar a la primavera…

    • Apertura: F22
    • Velocidad de obturación: 30 s
    • ISO: 100
  • Ya estás aquí… ¡Bienvenido!

    Ya estás aquí… ¡Bienvenido!

    Últimamente he estado un poco desconectado de la parte digital, no he publicado nada en el blog, ni he avanzado con los cambios en la página web ni he estado muy presente en las redes sociales. Ha sido un mes en el que he estado volcado en mi vida personal y en el que el resto ha pasado a un segundo plano. Poco a poco ésto irá cambiando e iré publicando novedades aquí en el blog y a través de las redes sociales. Pero será cuando deje de tener tanto sueño y todo empiece a estar un poco más normalizado y estabilizado.

    Mientras llega el momento, y para que veáis que a pesar de no haber publicado nada he seguido haciendo fotos, os dejo con una foto del modelo que ha concentrado mi atención en los últimos días. No es que haya estado demasiado colaborador delante de la cámara, pero bueno, alguna foto sí se ha dejado hacer. En la que os muestro tenía 9 días, ¡qué rápido pasa el tiempo!

  • De paseo por Guzmán

    De paseo por Guzmán

    Hoy quiero dedicar esta entrada a daros a conocer un pequeño pueblo de la provincia de Burgos llamado Guzmán. El motivo que me empuja a compartir algunos de los rincones de este pueblo con vosotros es que es el pueblo en el que vive mi abuela y hace un par de días fue su 92 cumpleaños, y ya que este año no hemos podido acercarnos a visitarla para celebrarlo pues he decidido dedicarle esta publicación y dar a conocer el pueblo en el que vive.

    Se trata de un pueblo pequeño situado en lo alto del páramo, un lugar que transmite una gran tranquilidad. Dentro del pueblo hay dos lugares de especial interés. El primero es la iglesia de San Juan Bautista, cuya elevada torre puede verse a lo lejos según nos vamos acercando hacia el pueblo. Si prestáis atención a la foto de la torre (tampoco demasiada, es algo que se ve a simple vista) podréis daros cuenta de que hay una especie de «camino» de piedras que tienen un color diferente al del resto de la torre. Esto se debe a que esa parte de la torre se vio afectada por un rayo, por lo que se hace visible la diferencia entre las piedras originales y las utilizadas en la reconstrucción.

    El otro lugar destacado es el Palacio, que hoy en día es un hotel y restaurante (www.palaciodeguzman.es). Desde la ventana de uno de los comedores está realizada la foto panorámica que acompaña la publicación. Un lugar acogedor que si pasáis por Guzman no podéis dejar de visitar.

    Además de estos dos lugares de interés también podéis visitar la ermita que se encuentra dentro del pueblo, así como pasear por sus estrechas calles en las que podréis observar cantidad de esos pequeños detalles tan propios de los pequeños pueblos de la meseta. Un pequeño lugar ideal para evadirse y disfrutar de la tranquilidad de sus calles y sus paisajes.

    De las fotos os puedo comentar que fueron tomadas el pasado mes de Marzo, mientras disfrutaba de un bonito paseo en familia. He escogido estas 8 porque creo que son las que me han parecido más adecuadas para transmitir la identidad de este pueblo que os invito a conocer. Guzmán os está esperando, espero que os guste.

     

  • Esperando a Olivia – Sesión de fotos premamá

    Esperando a Olivia – Sesión de fotos premamá

    El sábado pasado pude disfrutar de una gran tarde con la compañía de una pareja llena de amor esperando a su futura hija, que no tardará en llegar. Os mostraré sólo una pequeña parte de las fotos de premamá que salieron de ésta sesión, pero las suficientes para que os hagáis a la idea de como transcurrió todo. Yo disfruté un montón con ellos, y creo que ellos también conmigo.

    Sólo puedo agradecerles la confianza que han depositado en mi para inmortalizar este momento tan importantes de su vida y desearles que salga todo muy bien en las próximas semanas y disfruten mucho con Olivia.

    Si estás pensando en una sesión de fotos premamá puedes encontrar más información aquí.